La cumbre de la OTAN en La Haya ha devuelto algo de aire político al Gobierno de Pedro Sánchez tras unas semanas complicadas tras la crisis provocada por Santos Cerdán. La satisfacción en Moncloa tras los resultados de la cumbre es total. Consideran que se han cumplidos sus objetivos y que han llegado al equilibrio que buscaban. Por un lado, mantener la "unidad" de la OTAN y no llegar a un bloqueo. Por otro, que se respete la voluntad de España de no tener por qué llegar al 5% del PIB en gasto militar. 

Realmente a la cita llegaba ya Sánchez con los deberes hechos por parte de su equipo de negociación. Un trabajo que, señalan fuentes gubernamentales, se ha llevado a cabo durante meses pero que se ha intensificado en los últimos días. Ya el domingo el presidente del Gobierno comparecía en Moncloa para explicar el "acuerdo" alcanzado con Mark Rutte, secretario general de la OTAN. 

Pese a que la declaración conjunta firmada por los países miembros hace referencia al compromiso con un 5% del gasto, en Moncloa y el propio Sánchez se ratifican en una suerte de excepción española. El líder socialista se basa en las cartas intercambiadas con Rutte y la "flexibilidad" que les otorga. Moncloa también destaca que la fórmula diplomática usada en la declaración conjunta es lo suficientemente ambigua como para que se avale la posición española. La clave sería que no se usan conceptos como "todos los aliados" sino simplemente "aliados". 

El Gobierno considera que puede cumplir con los objetivos de "capacidades", que son secretos, solo con un gasto del 2,1%. "No es arbitrario", indicó Sánchez. La cifra viene de un cálculo realizado por las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Defensa, según destacó el propio Sánchez en su rueda de prensa. "Gana España, gana la OTAN y algo muy importante para nuestra sociedad, que es la seguridad y el estado de bienestar", destacó. 

Rutte, al término de la cumbre, reiteró su discrepancia. Algo que también es un argumento de autoridad para Moncloa. "Hay un acuerdo sobre no estar de acuerdo en que ellos piensan que pueden alcanzar los objetivos de capacidades con un 2,1 % del PIB, la OTAN dice que tiene que ser el 3,5 % como para todos los otros aliados", señaló. El secretario general de la OTAN añadió también que todos los aliados informarán sobre cómo están alcanzando los objetivos. "Así que ya veremos", afirmó. 

Lo cierto es que, como señala Rutte, habrá revisiones anuales del gasto y las capacidades por lo que el Gobierno ahora ha ganado tiempo. En todo caso mantienen que su posición es inamovible pese a las críticas que les lanzan indistintamente desde la derecha, con el PP a la cabeza, o la izquierda, con una posición muy crítica por parte de Podemos. 

Las amenazas de Trump

Si hay otro asunto que les da la razón en sus planteamientos, según Moncloa, es la actitud mostrada por Donald Trump, presidente de EEUU. Sánchez y él no cruzaron palabra ni plano durante su estancia en La Haya pero el líder socialista evitó ahondar en la cuestión cuando fue preguntado por los medios de comunicación. "No he tenido ocasión de saludarle ni de intercambiar palabras. Pero todos los Estados miembros saben de la garantía y confianza que tiene España con la OTAN", se limitó a decir. 

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En los últimos días Trump se ha mostrado muy crítico con la posición española sobre el gasto en defensa. "España es un problema, la OTAN está teniendo un problema con ellos, y eso es muy injusto para el resto de los socios", dijo este martes a los periodistas que le acompañaban en el avión Air Force One. Además dedicó un espacio en sus redes sociales a un artículo crítico con el gasto militar español.

Y este miércoles, en la rueda de prensa ofrecida en La Haya tras la cumbre, fue aún más allá. "España es terrible lo que han hecho, son el único país que no pagará al completo", afirmó Trump en este sentido. "No voy a permitirlo. Es injusto", añadió. Trump incluso ha amenazado a nuestro país con una respuesta comercial. "Tendrán que pagar el doble", advirtió. 

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En Moncloa prefieren no entrar a un choque directo con el presidente estadounidense. Las fuentes consultadas, eso sí, señalan que sus críticas refuerzan su posición sobre el gasto en defensa. "Lo que queda claro es que nuestra posición es firme", destacan a Público.

Las mismas fuentes reconocen que el papel de Trump les ha venido bien "para combatir las mentiras del PP" "Es muy difícil insistir en que vamos a llegar al 5 % cuando te critica Trump", añaden al respecto. El propio Sánchez destacó que si gobernaran los populares no dudarían en aumentar hasta esa cifra el gasto.

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Desde el nuevo mandato de Trump en la Casa Blanca Sánchez ha tratado de mantener un equilibrio entre el choque ideológico con el presidente estadounidense y no romper la alianza con EEUU. Tampoco en el marco de la OTAN. Lo de La Haya es un capítulo más. El líder del Ejecutivo ha apelado al mismo tiempo a la importancia de la alianza atlántica y al respeto de la "soberanía española" dentro de la misma. 

La agenda internacional del presidente del Gobierno además continúa estos días. Un hecho que permitirá un momentáneo cambio de focos. Este jueves Sánchez estará en Bruselas para participar en el Consejo Europeo. El fin de semana se desplazará a Sevilla para hacer lo propio en la Conferencia Internacional de Financiación al Desarrollo impulsada por la ONU. 

El lunes 30, eso sí, declara Cerdán en el Tribunal Supremo. En el horizonte temporal interno de Sánchez sobre este caso la cita marcada en rojo es el 5 de julio. Ferraz acogerá ese día el Comité Federal del PSOE donde se abordarán los cambios en la dirección anunciados por Sánchez y se presentarán las medidas de "regeneración y control" en las que ya trabaja el partido. 

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Cuatro días después, el 9 de julio, el presidente del Gobierno comparecerá por partida doble en el Congreso. Será entonces cuando palpar de nuevo de manera directa la situación de la legislatura y la confianza que mantienen sus aliados parlamentarios.